Collage de diversos discos lanzados en 1982

1982: el nacimiento del disco compacto

Esta nueva tecnología, popularizada a partir de los años 80, inauguró lo que hoy conocemos como la era digital en el mercado de la música grabada.

La introducción comercial de los reproductores de discos compactos ocurrió en 1982 y supuso la eclosión de una nueva tecnología de sonido jamás imaginada: se iniciaba así lo que luego se conoció como la era digital de la música grabada. Los formatos más populares de consumo de música envasada en ese entonces eran exclusivamente análogos: vinilos, casetes y cintas de 8 pistas.

La idea del disco compacto era mejorar, de alguna forma, la experiencia del usuario en cuanto a la calidad de sonido de la música grabada: finalmente estaba disponible un sistema de reproducción de música sin ruidos extraños, como aún ocurre con la reproducción de casetes y vinilos.

El sistema de audio que hizo posible esta suerte de revolución fue el reproductor Sony CDP-101, comercializado en primera instancia exclusivamente en Japón desde el viernes 1 de octubre de 1982. El anuncio del lanzamiento se había hecho unas cuatro semanas antes, el martes 31 de agosto en la capital nipona, Tokio[1].

A partir de marzo del año siguiente estuvo disponible a nivel mundial. Dicho reproductos se fabricó entre 1982 y 1984, y fue posible gracias a un desarrollo tecnológico colaborativo entre Sony y Philips, establecido en octubre de 1979[2].

Algunas de sus ventajas consistían en el hecho de proporcionar una excelente calidad de sonido, ser un equipo duradero y de un tamaño compacto. También trajo consigo la posibilidad de almacenar más de 70 minutos de música en un solo disco.

Sumado a eso, el usuario ahora podía escoger qué canción o pista podía escuchar mientras descansaba sentado en un sofá, con sólo presionar una combinación de botones desde un control remoto. Y como si fuera poco y a diferencia de una cinta de casete o un vinilo, el CD no sufriría desgaste ni deterioro a causa de su reproducción o almacenamiento.

Andre Millard explica en su libro America on record: a history of recorded music, que el CD contenía «un sonido inusualmente limpio, tan puro que al principio golpeaba los tímpanos acostumbrados al reconfortante silbido de la cinta y a los agudos borrosos y parcialmente oscuros de los discos de vinilo»[3] (Millard, 1995, p. 353).

Diseñado por el ingeniero Toshitada Doi, su precio de venta no era particularmente accesible. Adquirir uno significaba tener que desembolsar la ostentosa suma de 168.000 yenes[4], algo así como $730 dólares de la época, una cifra que equivale a $2.385 dólares en pleno 2024[5].

La primera producción musical lanzada en formato CD ese histórico viernes 1 de octubre fue «52nd Street»[6], sexto álbum de estudio del artista norteamericano Billy Joel[7], título que fue publicado originalmente en el año 1978 en formato vinilo 12” y casete. Ese día fueron puestos en el mercado 14 producciones más en este nuevo formato, incluyendo grabaciones de música clásica, rock y pop.  

En 1981 la venta de casetes había alcanzado la venta de 100 millones de copias, mientras el formato vinilo había logrado sumar 308 millones de unidades comercializadas a nivel mundial[8].

Cuando el disco compacto debutó en el mercado de la música grabada un año después, el vinilo seguía liderando las ventas, con 273 millones de copias. En contraste, los casetes alcanzaban 125 millones de copias comercializadas: las pequeñas cintas magnéticas de audio estaban quitándole terreno al acetato.

El CD lentamente fue compitiendo con los clásicos formatos análogos: en 1986 se vendieron 50 millones de copias, mientras que la cinta había logrado vender poco menos de 350 millones de unidades. El vinilo profundizaba su declive con 110 millones de copias.

En 1986 la manufactura de CDs alcanzaba los 45 millones de copias. En 1988 ya se producían 100 millones de CDs al año y en 1992 la cifra se había triplicado, alcanzando una masiva fabricación que alcanzaba los 300 millones de copias[9]. Para 1989 la venta de compact discs alcanzó los 200 millones de unidades comercializadas[10].

“El año 1988 marcó un punto de inflexión en la industria musical”, explica George Plasketes en su artículo Romancing the record: the vinyl de-evolution and subcultural evolution[11]. Ese año, por primera vez, la venta de CDs fue superior a la venta de vinilos.

Según información obtenida desde Discogs, una de las más respetadas e importantes bases de datos de música que existe actualmente en línea, en 1982 fueron lanzados un total de 142 títulos en este nuevo formato.

Sin embargo, esta cifra no puede considerarse como definitiva debido a que es posible que en este archivo existan títulos de discos duplicados o, por el contrario, sencillamente ausentes.

La compañía discográfica que alcanzó la delantera, esto respecto de la cantidad de discos editados en formato CD, sería CBS/Sony, con un total 70 lanzamientos. Entre sus artistas figuran Michael Jackson y Willie Nelson, o agrupaciones como Pink Floyd y Journey.

Luego se sitúa Denon, con 19 títulos, al que le sigue Epic, que suma doce. Más abajo aparece Epic/Sony con seis, CBS Masterworks con cinco, Canyon con cinco, Niagara Records con cuatro y UMI, Stash Records, A&M Records y RCA Red Seal, con dos títulos cada uno.


[1] Abadía Digital. “Sony CDP-101, el primer reproductor de CDs de la historia”. Accesible en: https://www.abadiadigital.com/sony-cdp-101-el-primer-reproductor-de-cds-de-la-historia/

[2] Schouhamer Immink, K. A. (2018) “How we made the compact disc”. Nature Electronics.

[3] Millard, Andre (1995). America on record: a history of recorded music. Cambridge University Press. 

[4] Hi-Fi Hall of Fame. “Sony CDP-101 Compact Disc Player”. Accesible en: https://hifihalloffame.com/equipment/sony-cdp-101-compact-disc-player/   

[5] Conversión hecha en: https://www.in2013dollars.com/ 

[6] Discogs. “Billy Joel – ‘52nd Street’”: Accesible en: https://www.discogs.com/es/release/2799403-Billy-Joel-52nd-Street

[7] Sony. “Opposed by Everyone”. Accesible en: https://www.sony.com/en/SonyInfo/CorporateInfo/History/SonyHistory/2-09.html

[8] La venta de unidades de casetes en este caso se refiere exclusivamente a la comercialización de cintas “originales” pre-grabadas y no a cintas “vírgenes”, destinadas a realizar copias o registros de audio de otra naturaleza.  

[9] Sony. “Studio Recorders Go Digital”. Accesible en: https://www.sony.com/en/SonyInfo/CorporateInfo/History/SonyHistory/2-10.html

[10] Millard, Andre (1995). America on record: a history of recorded music. Cambridge University Press.

[11] Plasketes, George (1992). “Romancing the record: the vinyl de-evolution and subcultural evolution”. Journal Of Popular Culture.